La historia de México está marcada por el activismo apoyado en la gráfica como gran pilar, desde la Revolución pasando por el Muralismo mexicano, los símbolos fueron parte de la lucha política, pero en el año 1968 la lucha estudiantil convirtió al cartel en su principal exponente, un tanto alejado del nacionalismo clásico, reconstruyendo el agitar revolucionario que caracterizó el final de la década de 1960; el segundo cisma de la gráfica política es definitivamente durante la explosión del #YoSoy132, pues mientras que en el 68 el acceso a los materiales era costoso, obligando a ser altamente efectivos en el mensaje y distribución, en el caso del cartel #YoSoy132 durante 2012, tuvo una gran efervescencia a través de un canal muy difícil de controlar en ese tiempo por el gobierno o los medios de comunicación hegemónicos, las redes sociales.